Concepto de Fake News

¿Qué son las Fake News?

En los medios de comunicación, mercados comerciales, medios políticos o sociales, se conoce como fake news o noticias falsas a toda aquella información que tiene el propósito de engañar o desorientar a las personas, cambiando algunos detalles o por completo los hechos acontecidos realmente.

Muchas de las fake news son incluso invenciones de medios de comunicación y entes que tratan de conducir o manipular resultados futuros que los beneficien de alguna manera, sin medir las consecuencias que estas noticias puedan ocasionar en la población general o privada.

A través de los años estas noticias han producido mucho daño en diferentes sectores, desde la vida privada de alguna persona hasta lograr cambiar las decisiones en votaciones presidenciales que marcan la historia de toda una década afectando incluso a generaciones futuras.

Aunque la realidad sea otra, existen ocasiones donde erradicar una mala información se vuelve imposible, ya que los mecanismos con que están son ejecutadas y difundidas han evolucionado con el paso de la tecnología y la comunicación global que día a día va creciendo en todos los sentidos. Es muy fácil que se expandan bulos por las redes sociales y por Internet en general, y muy difícil convencer a esa gente que ya lo ha visto de lo contrario, porque seguramente ni siquiera le llegue esa segunda información, solo se quedará con lo que quiera quedarse.

¿Para qué sirven las Fake News?

Para las personas o entidades que crean estas falsas noticias su uso puede ser importante porque su principal objetivo es manipular la información suministrada, lo que puede concederles mayor beneficio en diferentes áreas según la noticia y su efecto en el público.

Pero, en general, para el resto de la población, las noticias falsas son causantes de muchos daños que pueden afectar a corto, medio y largo plazo, dependiendo de su fortaleza. Por esta razón es siempre recomendable verificar la información y la fuente de la misma.

Caer en engaños no hace bien para las personas que son víctimas principales o secundarias de las fake news. Por otro lado, creer en todo lo que se ve y oye no es una buena práctica de la información, y mucho menos compartir aquella que no esté confirmada por entidades confiables que manejen mejores datos.